16 abril 2009

subrogando voy

subrogando vengo... y por el camino yo me entretengo.

Despues de un mes y pico finalmente, parece ser que cambio la hipoteca de banco. Bueno, de momento dejemoslo en que el nuevo banco me quiere como nuevo cliente hipotecario, que hoy por hoy, no es poco. Ahora tendre que ser yo el que acepte o rechaze la oferta vinculante que me van a presentar.
Cuando me dieron la hipoteca por primera vez no pusieron el mas minimo problema en otorgarmela con una nomina mas birriosa que la actual, sin seguro de vida, sin pedirme el contrato indefinido y tuve que golpear varias veces al director de la entidad con un periodico para evitar que me la chupara.

A dia de hoy, en la nueva entidad, para una hipoteca menor (si, poco a poco la voy pagando) me han pedido:

- las nominas
- El contrato indefinido
- La tasacion completa del piso cuando lo compre
- Los recibos de los pagos
- Las Escrituras
- La nota simple de cargas
- Preguntas indiscretas sobre mi estado financiero, capacidad de ahorro, estado civil, estado de salud, vehiculos a mi nombre...

Y solo les ha faltado el certificado de buena conducta de la parroquia, el certificado de vacunas desde la infancia y si llevo los calzoncillos limpios.

Realmente me dan ganas de coger ahora la oferta vinculante, encuadernarla con tapas duras, ponerle una espiral, enrrollarla y metersela en el agujero vinculante del culo, desde luego me quedaria mas ancho que alto.

En fin, la vida tiene estas cosas...

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